El diario de ánemos

es sencillo aliviarle
El dolor a un ala sin
Fuerzas, es un error
Equivocarse, dos, tres,
Sin un adiós al ultimo
Rayo del sol.

Es como el agua, gota
A gota se convierte en luz,
La luz en ausencia y la ausencia
De la luz en oscuridad, es como
Si fuese a bailar, solo a bailar
Y luego todo estará bien, estoy harta
De promesas.

¡Que alguien me ayude!
A pasar de aquí, allá y luego
no mirar atrás, olvidar el objetivo
De las batallas, unos por envidia,
Otros por dinero y dormirse en
Brazos del mal, con perjuicio,
Ser ala sin fuerzas, con tormento,
y despedirme del adiós con
El ultimo sonido que le
Queda a mi voz.

No olvides leer, que es lo único
Que queda.

Ánemos