
Sienten frió en la madrugada,
Pero anoche se asustaron
Por que parecía no amanecer,
Anoche, que es la noche pasada
De esta misma noche, pues
El sol, el día, aun no se hace presente
y ellas tiemblan.
Están desnudas, sin ropa,
Sin fuerzas ni aliento, mucho menos
Ganas, sienten miedo y ganas que son
Ganas de muerte.
El jardín, que es bosque y selva,
Un desierto con flores sin ropa,
Que apenas despiertan,
Flores de adentro, flores, que son
Vísceras del viento.
Que son mentiras sin mancha,
Reales en lo más cierto del cierto
De sus pétalos, sin mariposas,
Sin acentos en su habla, flores
Que se desgarran con la noche
y hasta con el sol ¡Malditas flores!
Pobres flores, que débil.
Su magia extinta le desmaya,
Marchitas y exiliadas, lanzadas
Al olvido, solas, con ellas y nada.
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